El aula de los niños mayores
2-3 años

Su mundo ¡crece y se expande!

Esta época se caracteriza por la capacidad de asombro. La mayoría de los niños de 2 años están llenos de energía y una curiosidad innata acerca del mundo que los rodea. Es por eso que ofrecemos una tonelada de libros, juegos y juguetes, propuestas y experiencias que no les dejará indiferentes. Así mismo la socialización empieza a adquirir mayor relevancia y comienzan a aprender componentes básicos sobre la cooperación, la convivencia, la colaboración en el trabajo que realizamos todos juntos en clase. 

Al mismo tiempo también desarrollan rápidamente su sentido de independencia. Ofrecemos oportunidades para que exploren esa individualidad que crece día a día con ellos, con cosas como lavarse las manos y aprender a ir al baño. Así los lavabos, los inodoros y los muebles de nuestras aulas son del tamaño de un niño, para que puedan generar confianza sabiendo que pueden hacerlo todo por sí mismos.

El ambiente infantil más adecuado

El ambiente activo del aula de dos años involucra cuerpo, mente, manos, imaginación y corazón con numerosas oportunidades para moverse, explorar y descubrir experiencias nuevas a la vez que se forma la base para el aprendizaje en etapas posteriores. Los niños están inmersos en propuestas proactivas. Las actividades están pensadas para satisfacer las necesidades cambiantes del desarrollo de este grupo de edad mientras evaluamos continuamente en base a los indicadores que guían nuestro proyecto educativo y nos permite una adaptación individualizada para cada pequeño.  

Dentro del día de un niño mayor

Los niños de esta edad prosperan con la rutina. Usamos un horario con imágenes simples para mostrarles qué esperar durante el día. Las rutinas ayudan a los niños a sentirse seguros y a saber qué viene en cada momento. Les prepara mentalmente según la actividad (si es calma o requiere movimiento). También les ayuda a sentirse parte del plan. Hablaremos sobre ellas en nuestro círculo de la mañana (asamblea) y acudiremos a las imágenes a modo de recordatorio en distintos momentos del día. 

Tiempo de grupo

El tiempo de grupo, más conocido como “la asamblea” ocurre todos los días en cada una de nuestras aulas. En el aula de dos años, los niños se reúnen entre otras cosas para aprender y desarrollar el sentido de comunidad. Las maestras contarán cuentos, cantarán canciones y más entorno al tema propuesto de aprendizaje.

Tiempo de juego de simulación

Los niños de dos años están en el comienzo de la etapa simbólica. Es esa etapa en la que se comienza a jugar “como si…”

El niño empieza a entender el rol de los demás y el suyo propio y a trazar las relaciones entre ellos.  No obstante, todavía carece del fundamento lógico para crear patrones de causa y efecto por lo que su cerebro habrá de seguir madurando. 

Tiempo de exploración del movimiento

Para que los niños pongan a prueba sus capacidades y habilidades motoras y sigan desarrollándolas según sus necesidades. Las experiencia de aprendizaje en esta aula están destinadas a las necesidades tan cambiantes del desarrollo de este grupo de edad muy activo.

Nuestras maestras establecen un ritmo diario para los niños del grupo de 2 años que consiste en tiempo en grupo, tiempo de cuentos y canciones, tiempo de exploración, descubrimiento y actividad, tiempo de juego al aire libre, comidas, siestas y juego no estructurado.

Mira, ¡yo solito!

Desarrollar habilidades que prepararán a tu hijo para la siguiente etapa educativa. Las matemáticas y las ciencias simples, el juego simbólico, el juego en grupo… Todo le ayudará a habituarse a un entorno escolar más estructurado y caminando hacia una mayor independencia.

Para nuestros niños, preparamos actividades lógico-matemáticas tempranas, que incluyen crear patrones de series y contar, mezcladas con propuestas divertidas y lúdicas. Ayudamos a desarrollar la memoria y la concentración realizando tareas rutinarias como pasar lista mientras aprenden algo de los compañeros o guardar de una modo determinado los juguetes.  Paciencia, perseverancia y creatividad para comprender su mundo y el de los otros mientras desarrollan un pensamiento crítico.  

Les ayudamos con esas habilidades y les mostramos cómo turnarse. Resolver pequeños problemas y conflictos cotidianos de forma positiva. Desarrollar la empatía y la resiliencia, mientras se fortalece la autoestima y los vínculos seguros y estables.  

Lenguaje oral, gestual, escrito… A esta edad comienzan a entender el dibujo y a darle un significado a sus garabatos como forma de expresión. También son capaces de responder a preguntas sencillas sobre las historias que contamos. 

También se entusiasmará explorando medios artísticos y plásticos, disfrazarse, hacer teatrillos con marionetas o usar la música para expresar sentimientos.  

La habilidad de interactuar con los otros y una mayor conciencia sobre ellos mismos y de sus emociones; comprensión de sus relaciones con otros como la familia, los amigos, los miembros de la comunidad.